Gracias a varios concursos entró a los 20 años, prestando su servicio militar en el palacio del Elysée en París, entrando en el equipo personal del presidente Valéry Giscard D´Estaing, lugar en el que participó en la elaboración de numerosos banquetes para personajes tales como la Reina Isabel II de Inglaterra, el Presidente Jimmy Carter, el Presidente de Egipto Anwar el-Sadat, entre otros.

Trabajó posteriormente en restaurantes célebres tales como el de los hermanos Troisgros en la ciudad de Roanne, en Auberge de l´ill, el del mundialmente conocido Paul Bocuse en la ciudad de Lyon y en el Dodin Bouffant de París, restaurante al que acudían toda clase de celebridades como Woody Allen, Mia Farrow, el cantante Georges Moustaki, el presidente de Francia François Mitterrand,  y muchos otros.

Durante su larga travesía, trabajó en Australia y luego en San Francisco, donde conoció a alguien que lo trajo a México, iniciando sus actividades en el Hotel “La Plaza” de Tequisquiapan, Querétaro. Enamorándose perdidamente de México y de una mexicana, se fue al Hotel “Casa de Sierra Nevada” en San Miguel de Allende, Guanajuato, Hotel que obtuvo principalmente por su cocina, la distinción Francesa de “Relais et Chateaux”. 

En 1990 abrió “Chez Pascal”, en la Ciudad de México (Oslo No. 10 Zona Rosa) lugar frecuentado habitualmente por clientela del medio artístico y político de México. Entre sus clientes más populares se encontraban el cantante Luis Miguel con su novia Adela Noriega, el conductor Adal Ramones, los hermanos Slim, el cineasta y director Alejandro González Iñárritu, Ricardo Rocha con Guadalupe Pineda, Jacobo Zabludovsky, entre otros.

Fue el chef especial de la residencia oficial de Los Pinos durante los mandatos de Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, durante ese periodo atendió a Charles el príncipe de Gales, al presidente de Argentina Carlos Saul Menem, al presidente de la comisión Europea Jacques Delors, entre muchos más. Fue profesor de Comida Francesa en la Ibero y E.M.T. como asesor y responsable de los comedores del grupo Tribasa.

Después de 30 años en México, en busca de un ritmo más tranquilo, el chef galo ahora naturalizado mexicano, decidió asentarse en Cuernavaca y fundar en diciembre del 2003 el restaurante La Provence, lugar al que también fue seguido por sus fieles clientes que han quedado fascinados por su excelencia culinaria y por sus emblemáticos platillos como son su sopa de cebolla, sus escargots bourguignonne (Receta de su abuela), su confit de canard (Pato), su tarte tatin y sus famosos estofados franceses. 

A pesar de tantos años de carrera, el chef Pascal Brunereau, sigue sintiéndose como embajador de su patria, y continúa manteniendo un contacto cálido y personal con sus comensales, caracterizándose por presentar él mismo los platillos del día y esforzándose por crear nuevos guisos que representen a su amada Francia adaptándolos al paladar mexicano.